.- Grévol común Tetrastes bonasia
.- Pico mediano Dendrocopos medius
Grévol común Tetrastes bonasia
(*) Información extraída del Atlas de Especies Nidificantes de Aragón
Considerada como probablemente extinguida en Aragón (Aragües, A. y Lucientes, J. 1980) y en España (Blanco, J.C. y González, J.L.). Las últimas referencias más o menos confirmadas se corresponden con la observación realizada en Navarra por Purroy en 1972 (Elósegui, J. 1985), y para Aragón con observaciones imprecisas datadas en 1959 en la cabecera del Valle del Aragón (Aragües, A. y Lucientes, J. 1980) y hacia 1960 observada en Ordesa por parte de "ornitólogos y guardas" (Antor, R.J. 1985). Existen por otra parte ciertas citas aportadas por pobladores de algunos valles pirenaicos, especialmente en el Pirineo central, que informan de observaciones muy esporádicas de "pequeños gallos de bosque" que podrían corresponder a esta especie.
Existe un dato reciente que nos hace considerarla en el Atlas. El 1 de noviembre de 1990, precisamente en el valle de Ordesa, se observa un ejemplar en bosque mixto de abetos, hayas y pinos silvestres, en un barranco de orientación sur (Villacampa, A.G. 1993). Este dato podría indicar la existencia de núcleos relícticos de la especie que habrían podido pasar desapercibidos hasta la fecha.
Esta situación sería concordante con las observaciones registradas en la vertiente norte pirenaica, en la que desde los años ochenta se han obtenido varias referencias de la especie concentradas sobre todo en el sector del Haute-Garonne pero también en el sector Aspe-Ouseau (Catusse, M., Mothe, T. y Menoi, E. 1992), habiendo sido anteriormente una especie ignorada en este sistema montañoso tanto en los Atlas regionales como nacionales y considerada extinguida (Yeatman, L. 1976; A.R.O.M.P. 1983; Boutet, J.Y. y Petit, P. 1987). Circunstancias similares se produjeron en las elaboraciones de los Atlas catalán (Muntaner, J., Ferrer, X. y Martínez-Vilalta, A. 1984) y navarro (Elósegui, J. 1985), en los que se considera bien la extinción de la especie en el primero, o bien identificaciones incorrectas en el segundo.
Esta situación sería concordante con las observaciones registradas en la vertiente norte pirenaica, en la que desde los años ochenta se han obtenido varias referencias de la especie concentradas sobre todo en el sector del Haute-Garonne pero también en el sector Aspe-Ouseau (Catusse, M., Mothe, T. y Menoi, E. 1992), habiendo sido anteriormente una especie ignorada en este sistema montañoso tanto en los Atlas regionales como nacionales y considerada extinguida (Yeatman, L. 1976; A.R.O.M.P. 1983; Boutet, J.Y. y Petit, P. 1987). Circunstancias similares se produjeron en las elaboraciones de los Atlas catalán (Muntaner, J., Ferrer, X. y Martínez-Vilalta, A. 1984) y navarro (Elósegui, J. 1985), en los que se considera bien la extinción de la especie en el primero, o bien identificaciones incorrectas en el segundo.
Fuentes:
.- Aragües, A. y Lucientes, J. (1980), Fauna de Aragón: las aves, Zaragoza, Guara Editorial..- Blanco, J.C. y González, J.L. (1992), Libro Rojo de los Vertebrados de España, Col. Técnica, ICONA.
.- Elósegui, J. (1985), Navarra. Atlas de aves nidificantes, Caja de Ahorros de Navarra.
.- Antor, R.J. (1985), Los Pirineos, Madrid, Penthalon Ediciones.
.- Villacampa, A.G. (1993), "Cita de Grévol (Tetrastes bonasia) en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido", Lucas Mallada, 5, pp. 121-125.
.- Catusse, M., Mothe, T. y Menoi, E. (1992), "La Gélinotte des Bois Bonasa bonasia existe dans les Pyrénées", Alauda, 60, pp. 129-133.
.- Yeatman, L. (1976), Atlas des oiseaux nicheurs de France de 1970 a 1975, Ministere de la Qualité de la Vie.
.- A.R.O.M.P. (1983), Atlas des oiseaux du Midi et des Pyrénées, Toulouse.
.- Boutet, J.Y. y Petit, P. (1987), Atlas des oiseaux nicheurs d´Aquitaine. 1974-84, Centre Regional Ornithologique Aquitaine-Pyrénées, Consell Regional D´Aquitaine.
.- Muntaner, J., Ferrer, X. y Martínez-Vilalta, A. (1984), Atlas dels ocells nidificants de Catalunya i Andorra, Barcelona, Ketres Editora.
.- Sampietro, F. J.; Pelayo, E.; Hernández, F.; Cabrera, M. & Guiral, J. (1998). Aves de Aragón. Atlas de especies nidificantes. Zaragoza, Diputación General de Aragón e IberCaja.
NOTA DEL COMITÉ EDITORIAL:
De acuerdo con lo contenido en el documento del proyecto de reintroducción del grévol (Bonasa bonasia L.) en el Valle de Arán (Pirineos Centrales, Lérida) del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente (autor A. Petit), la existencia de la especie en los Pirineos en un pasado reciente es aceptada por la mayor parte de los autores actuales y así parecen confirmarlo algunas obras de la segunda mitad del siglo pasado (Catusse et al. 1992; Arribas 2004).
Sin embargo, no hay citas fósiles de Bonasa bonasia en los Pirineos, aunque sí que se han encontrado en el área cantábrica y en el Sistema Central (en esta última zona, los restos datan del Neolítico). La evidencia más concluyente de su presencia en un pasado reciente en los Pirineos es la confirmación de la existencia de ejemplares disecados de esta especie provenientes de esta cordillera en algunos museos de historia natural franceses (E. Ménoni com. pers. a A. Petit). Concretamente, el autor refleja en su documento que se conoce la existencia de 14 ejemplares cazados a finales del siglo XIX y principios del XX.
Las discrepancias entre científicos e investigadores son más acusadas cuando se trata de confirmar la presencia reciente de la especie en los Pirineos. Así, algunos autores la consideran extinguida desde principios o mediados del siglo XX (Muntaner et al. 1983; Díaz et al. 1996; Woutersen & Grasa 2002; Martí & del Moral 2003; Estrada et al. 2004) y otros en cambio, consideran que hay motivos para pensar en su supervivencia hasta la actualidad (Yeatman 1976; Catusse et al. 1992; Yeatman-Berthelot & Jarry 1995; Sampietro et al. 1998; Arribas 2004).
Las citas de observaciones y las evidencias de la presencia del grévol en los Pirineos se concentran en tres áreas: Pirineos occidentales (Pirineos atlánticos, Navarra y Huesca), Pirineos orientales (Ariège y Aude) y el núcleo de los Pirineos centrales, donde se concentra el mayor número de observaciones recientes, centrado en el Alto Garona. Los únicos ejemplares conservados en museos que son de procedencia conocida tienen el origen en los Pirineos atlánticos. El origen de la posible población pirenaica también es incierto y no se descartan ni la supervivencia de núcleos relictos, ni la reintroducción, ni tan siquiera la migración de individuos de poblaciones cercanas (Macizo Central) (Catusse et al. 1992). Según este autor, la hipótesis más plausible es la supervivencia de poblaciones relictas.
.- Catusse, M.; Mothe, T. & Menoni, E. (1992). "La Gélinotte des bois Bonasa bonasia existe dans les Pyrénées." Alauda 60(3): 129-133.
.- Arribas, O. (2004). Fauna y paisaje de los Pirineos en la Era Glaciar. Barcelona, Lynx Edicions.
.- Muntaner, J.; Ferrer, X. & Martínez-Vilalta, A. (1983). Atlas del ocells nidificants de Catalunya i Andorra. Barcelona, Ketres Editora.
.- Díaz, M.; Asensio, B. & Tellería, J. L. (1996). Aves Ibéricas. I No Paseriformes. Madrid, J. M. Reyero Editor.
.- Woutersen, K. & Grasa, M. (2002). Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Atlas de las Aves. Huesca, Kees Woutersen Publicaciones.
.- Martí, R. & del Moral, J. C., (eds.) (2003). Atlas de las Aves Reproductoras de España. Madrid, Dirección General de Conservación de la Naturaleza-Sociedad Española de Ornitología.
.- Estrada, J.; Pedrocchi, V.; Brotons, L. & Herrando, S., (eds.) (2004). Atles dels ocells nidificants de Catalunya 1999-2002. Barcelona, Institut Català d'Ornitlogia. Lynx Edicions.
.- Yeatman, L. (1976). Atlas des oiseaux nicheurs de la France. Paris, Ministère de la Qualité de la Vie.
.- Yeatman-Berthelot, D. & Jarry, G. (1995). Nouvel atlas des oiseaux nicheurs de la France. 1985-1989. Paris, Ministère de la Qualité de la Vie.
(*) .- Sampietro, F. J.; Pelayo, E.; Hernández, F.; Cabrera, M. & Guiral, J. (1998). Aves de Aragón. Atlas de especies nidificantes. Zaragoza, Diputación General de Aragón e IberCaja.
En lo referente a la evolución del proyecto de reintroducción en los Pirineos Centrales, a principios de septiembre de 2011 se liberó una pareja de grévoles en un bosque del valle de Arán (Lérida) Ver noticia en Quercus y ya en el transcurso del año 2012, se liberaron 11 aves (6 machos y 5 hembras) en la orilla izquierda del río Garona. Los ejemplares procedían de los Alpes franceses y todos ellos portaban un radiotransmisor para su seguimiento Ver información del proyecto GALLIPYR
No se conoce ninguna observación suficientemente documentada en el transcurso de los últimos 50 años (aunque es probable que este pícido ocupase en el pasado buena parte del Pirineo), excepción hecha de una referencia no contrastada recogida en la web www.ebird.com que corresponde a un posible ejemplar observado en un parque urbano de la ciudad de Jaca el 25-05-81 (atribuida a Rob Mantel), motivo por el cual la especie figura recogida en la categoría de extinguida en el listado de las aves aragonesas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario